Facebook en pie de guerra contra las fake news
La victoria de Donal Trump en las elecciones de 2016, Jair Bolsonaro en las elecciones brasileñas de 2018 y la campaña del referéndum de Brexit, eventos que hicieron saltar las alarmas sobre el papel que desempeñan las redes sociales en los procesos políticos.
Por ello, y con vistas a las elecciones europeas de este año, Facebook ha presentado una serie de herramientas nuevas que los expertos estiman importantes para proteger la integridad de las elecciones. Entre ellas, evitar el uso de anuncios online para interferencias extranjeras y dar máxima prioridad a la transparencia en este tipo de contenido. Todos los anunciantes de la UE deberán estar autorizados por su país para lanzar campañas publicitarias relacionadas con las elecciones al Parlamento Europeo.
¿Cómo lo hacen los partidos políticos? ¿Cómo encuentran al destinatario perfecto para sus campañas?
La clave está en rastrear a los usuarios de la red, la compra de datos de búsqueda de las zonas en las que, el partido, cree que residen sus votantes. Analizar el contenido de las búsquedas y adaptar la estrategia de la campaña a los gustos del consumidor.
Otra de las estrategias utilizadas es la de dirigir el discurso al candidato del partido rival. Publicar contenido falso, fake news, que generen dudas, rechazo o incluso miedo en el votante. Este tipo de mensajes sobre la seguridad, la inmigración o el sistema sanitario suelen ser muy efectivos.
Facebook le planta cara a las fake news con nuevas reglas
Mark Zuckerberg obligará, en sus redes sociales, a cualquier anunciante de contenidos políticos en España a identificarse y señalar a quién o qué organización financia dicha campaña. En esta estrategia de transparencia, todos los anuncios de contenido político y otros asuntos en Facebook e Instagram dentro de la UE aparecerán con la etiqueta «pagado por» sobre el anunciante en la parte superior de dicho anuncio. Esto da la posibilidad al usuario de ver quién para ese contenido y en el caso de que se trate de un negocio u organización, sus detalles de contacto. Con un clic sobre la etiqueta, el usuario podrá visualizar más información como: el presupuesto de la campaña asociado a ese anuncio o cuantas visualizaciones tiene ese anuncio.
Los anunciantes estarán obligados a presentar una serie de documentos y una verificación técnica sobre su identidad y ubicación. Todos los anunciantes que alcancen al usuario con campañas de contenido político estarán autorizados como residentes en el mismo país que el usuario y deberán proporcionar información veraz sobre su identidad. Toda esta información servirá de ayuda a las autoridades en caso de sospecha.
Sin embargo, la herramienta preferida por las fake news sigue siendo WhatsApp.
WhatsApp dejará de ser el paraíso de los bulos
En whatsApp se le da más credibilidad a la información que recibe el usuario por el hecho de hacerlo de manera privada o entre círculos de amigos o familiares. Es en estas plataformas de conversaciones privadas entre usuarios donde se busca la viralidad más agresiva. Detectar bulos o desmentirlos en una red social como whatsApp es muy difícil.
Por esto, Facebook, dueño de WahtsApp, está adoptando las medidas necesarias para combatir la difusión de estas fake news por este canal. Una de estas medidas afectará directamente a la función de reenvío de estos contenidos, solo podrá hacerse cinco veces a otros usuarios o grupos. Otra de ellas limitará al tamaño de los grupos a los que se pueda enviar esta información.
Con las miradas puestas en las elecciones españolas del 28 de abril, Facebook ha creado un equipo de control de las fake news para la campaña electoral española. Para ello habilitará la herramienta que hemos tratado con anterioridad, que obligará a los anunciantes de contenido político a identificarse y dar cuenta de quién financia la campaña. Se estima que, de esta manera, se evitarán las intrusiones extrajeras en los procesos electorales.
La modificación de la ley electoral llevada a cabo mediante una enmienda en el senado provocó mucha polémica al interpretarse como luz verde a la creación de perfiles ideológicos. En realidad, permite a los partidos políticos recoger opiniones políticas en el contexto de actividades electorales. Los partidos podrán utilizar los datos recogidos para crear perfiles y enviar mensajes personalizados a sus votantes potenciales.
La campaña de las próximas elecciones estará claramente centrada en la búsqueda de la información verdadera e identificar aquella tergiversada y falsa que le llega al votante.