¿Cómo decirle NO a un cliente sin dañar la relación?
Una relación SANA con el cliente es lo más importante para nuestro negocio; y para mantenerla así, debemos aprender a decir NO cuando sea necesario.
Cuando estamos tratando con clientes, el servicio que les ofrecemos es la parte fundamental que mantendrá la reputación del negocio. Un cliente agradecido siempre será la mejor estrategia de promoción, pero si pasa lo contrario y no se siente a gusto con el trato que se le brinda, se puede llegar a perder no uno, sino varios clientes.
Si no está en tus posibilidades solucionar la inquietud de ese cliente, no quiere decir que no tengas que ser desatento con él, todo lo contrario, es una oportunidad para demostrar que a pesar de ello tienes la disposición de ayudarle.
A continuación algunos tips
Agradece su confianza antes de responder, dale a entender al cliente que te importa su opinión.
Ejemplo: «¡No me gusta esto! ¡Hazlo de nuevo!
- Respuesta correcta: «Gracias por tus observaciones ¿Cómo puedo mejorarlo?»
- Respuesta incorrecta: «¡Lo siento, perdón! Lo haré ahora mismo».
Sin excusas, sé sincero. Explícale educadamente por qué no puedes acceder a su solicitud y evita más inconvenientes.
Ejemplo: «Necesito todo esto en 5min».
- Respuesta correcta: «Entiendo tu molestia y estoy haciendo todo lo posible por brindar una solución a la brevedad, pero esto requiere un poco más de tiempo».
- Respuesta incorrecta: «Si claro, ya mismo».
Ofrece alternativas: Si no puedes cumplir su requerimiento, busca otras opciones o refiere a alguien de confianza. Lo importante, es que el cliente se sienta agradecido.
Ejemplo: «No te preocupes, conozco una persona muy capacitada que podría ofrecerte una solución».
No olvides hacer seguimiento: Si optaste por referir a otra persona, no dejes que se vaya sin más comunicación. Muestra interés en su caso, aún puedes tener un lugar en sus proyectos.
Ejemplo: ¡Hola (Nombre)! Un gusto saludarte, Solo quería saber si lograste solventar tu problema, cualquier duda, estoy a tu disposición.
Sabemos que decir “no” puede ser incómodo y que también surgen varios miedos, como por ejemplo miedo a que el cliente se enoje, miedo a perder al cliente, miedo a que hablen mal de mí y miedo a que las referencias sean negativas.
Cómo decir NO a un cliente
A continuación, te vamos a mostrar algunas formas de decir que NO sin perder la elegancia ni el respeto:
- «¿Podrías bajarme el precio?»:
- «Ese es el precio final por el trabajo, pero si deseas podemos ver qué se puede dejar para más adelante y así ajustar el valor final. ¿Te parece bien?».
- «¿Podrías hacer una muestra para ver si nos gusta tu trabajo?»:
- «Para llegar al resultado final, y que esté alineado con los objetivos de tu negocio es necesario pasar por un proceso. Yo estoy acá para ayudarte y guiarte hacía ese resultado. Lo que te puedo pasar son algunos trabajos anteriores y testimonios de mis clientes que validan mi trabajo».
- «¿Podemos hacer unos cambios más?»:
- «¡Claro! Recuerda que ya hicimos las 2 rondas de revisiones, por lo que cualquier cambio extra, lo podemos contabilizar como hora extra. ¿Te parece bien?».
- «¿Podrías tenerlo todo para mañana?»:
- «Sé que quieres tener todo lo más rápido posible, pero para lograr buenos resultados y hacerlo de la manera más óptima, lo podría tener listo para la semana que viene».
Decir NO significa que tienes claro lo que vale tu trabajo y lo seguro que te sientes de lo que haces. No hay que olvidar tener mucho tacto para decir NO, ya que no debemos pasar por maleducados o tercos, aceptar que algo puede mejorar o que el otro tiene la razón también es profesional.
Recuerda: Una relación sana con tus clientes ayudará a tu marca a crecer.